miércoles, 29 de mayo de 2013

Ocaña, Bullrich y Gil Lavedra defendieron un blanqueo a los bancos en 2001

Por Eduardo Di Cola (El autor fue el presidente de la Comisión Investigadora que investigó la fuga de divisas en el país) Escenario del año 2001: - La fuga de divisas alcanzó los U$S 14,9 MM; - La caída de las reservas del BCRA fue de U$S 19 MM; - La deuda creció exponencialmente financiando en gran medida la salida de dólares; - Solo entre julio y noviembre los depósitos bancarios cayeron 15.000 millones de pesos/dólares. A su vez los bancos: - Facilitaron la fuga de divisas. El 93% de los capitales que se fueron del país lo hicieron a través de la banca privada nacional y extranjera; - Ocultaron información. Más del 75% de ese dinero fue transferido bajo conceptos genéricos y confusos tales como “movimientos de capitales”, “movimiento de capitales varios”, “otras transferencias”, “otros giros al exterior” y otros de similares características; - Las omisiones de información al Banco Central llegaron al extremo de no declarar sucursales o entidades controladas en paraísos fiscales. En esas circunstancias el gobierno de entonces UCR-Alianza lanzó un blanqueo en favor de la banca. ¿Quiénes lo hicieron?, veamos: Rubén Giustiniani, Graciela Ocaña, Margarita Stolbizer, Eduardo Santín, Mario Negri, solo para citar los que aún continúan como parlamentarios, votaron la ley N* 25401 que en su art. 73 establece, para usar sus mismas expresiones, “la impunidad” en los blanqueos impositivos, dispensando a la AFIP de hacer la denuncia penal en el marco de la Ley Penal Tributaria y Previsional, a la vez que la obligó a desistir de las denuncias ya efectuadas. Una vez que el Congreso a través de la mencionada Ley aseguró “la impunidad” lanzan el blanqueo mediante Decreto de Necesidad y Urgencia N* 1387/2001 que lo suscribieron como Ministros Patricia Bullrich y Hernán Lombardi -actualmente funcionario de Macri- entre otros. En resumen: Graciela Ocaña, Rubén Giutiniani, Margarita Stolbizer, Mario Negri y Eduardo Santin como Diputados Nacionales, Gerardo Morales, Ricardo Gil Lavedra, Patricia Bullrich entre otros como funcionarios fueron los que en la etapa de mayor descontrol bancario, del mayor crecimiento del endeudamiento y caída de reservas, apoyaron, suscribieron y votaron en el año 2001 un blanqueo en favor de los bancos. En una nueva muestra de patética incoherencia hoy aparecen feroces opositores lanzando las acusaciones más temerarias por el blanqueo que se hace en favor de inversiones inmobiliarias y energéticas, en el escenario de mayor desendeudamiento de la historia, un sistema bancario con sólido respaldo y con la decisión política de hacer el esfuerzo para no volver a endeudarnos. Flagrante contradicción. En la etapa de mayor descontrol de toma de deuda y salida de capitales favorecieron a los bancos. Hoy en un contexto diametralmente opuesto se niegan en favor de inversiones con destinos genuinos. Queda claro los intereses que defienden fuente

lunes, 13 de mayo de 2013

LA CONSIGNA ES MENTIR. Clarín TE miente !!!

En ocasión del acto en All Boys, el 8/5 pasado, estábamos con un grupo de Compañeros en la primera fila, pegados a las vallas que separaban a los militantes latinoamericanos y los periodistas, los de toda calaña. Había enfrente de donde estábamos ubicados nosotros cuatro empleados del programa CQC: dos camarógrafos, una entrevistadora y un asistente. A nuestras espaldas escuchamos a alguien que decía “esos son del monopolio”. Inmediatamente los cuatro empleados del grupo se acercaron a los recién llegados y se saludaron. Acto seguido encendieron las cámaras “entrevistaron” a alguien que tenía un cuadro con la imagen de los Presidentes Nicolás Maduro y Cristina Fernández de Kirchner. El diálogo comenzó así: - “de dónde venís” –“de Belgrano” –“ah, te queda cerca”. Al notar que varios Compañeros prestábamos atención a lo que se decía, se apartaron entrevistadora y entrevistado, y no se pudo oir más. Luego de esta “nota” la “entrevistadora” le preguntó a su compañero de trabajo que esta de este lado de la valla –de dónde venís” -“de muy lejos” – “le traés algo al Presidente?” -“si, si, le traigo algo” carcajadas. Terminada la "nota" los tres se retiraron. Estos pequeños siervos de magnetto vienen con un libreto bajo el brazo, ese libreto La zoncera, la madre que las parió a todas: civilización y barbarie. Estos negros cabeza no saben para que vienen, se amontonan por un plan, por un chori, no saben hablar, cualquiera los engrupe y la votan esa… “Estar en casa es muy bueno” decía el eslogan del trece. Para los tilingos espectadores del monopolio ese mensaje es “estar en casa”. Para el monopolio esos tilingos son sólo tilingos llenos de ignorancia histórica y política cuyas cabezas hay que llenar de odio y más ignorancia. Para nosotros, el Pueblo, los tilingos son el medio pelo en la sociedad argentina del que nos hablara Don Arturo Jauretche. El medio pelo odia a los pobres porque tiene pánico de caer en la pobreza, siente visceral envidia hacia las clases altas porque sabe que jamás podrá alcanzar su buen pasar y tranquilidad, pero ignora que desde arriba lo desprecian a pesar de ser estúpidamente funcionales a sus intereses. Estos pequeños siervos de magnetto vienen con un libreto bajo el brazo, ese libreto La zoncera, la madre que las parió a todas: civilización y barbarie. Estos negros cabeza no saben para que vienen, se amontonan por un plan, por un chori, no saben hablar, cualquiera los engrupe y la votan a esa… “Estar en casa es muy bueno” decía el eslogan del trece. Para los tilingos espectadores del monopolio ese mensaje es “estar en casa”. Para el monopolio esos tilingos son sólo tilingos llenos de ignorancia histórica y política cuyas cabezas hay que llenar de odio y más ignorancia. Para nosotros, el Pueblo, los tilingos son el medio pelo en la sociedad argentina del que nos hablara Don Arturo Jauretche. El medio pelo odia a los pobres porque tiene pánico de caer en la pobreza, siente visceral envidia hacia las clases altas porque sabe que jamás podrá alcanzar su buen pasar y tranquilidad, pero ignora que desde arriba lo desprecian a pesar de ser estúpidamente funcionales a sus intereses.